Últimamente en las redes sociales se ha hecho muy viral el supuesto cabello que te aparece al abrir unos de las páginas de la Santa Bíblica. Sin embargo, esto es traído y hecho por nuestros hermanos protestantes de las denominaciones (Evangélicas) quienes se aseguran que al uno vaporizar el cabello con el agua y luego tomártelo, te hará sanarte y salvarte de la pandemia del COVID-19 que estamos travesando la humanidad.
Es muy importante que podamos saber, que primero el Señor no habla, ni sana a través de trucos así, que son más de hechicerías. El cabello son células muertas y nosotros como cristianos no estamos llamados a seguir a un Dios muerto; sino a un Dios que está vivo y que ha resucitado entre los muertos. Las sanaciones son hechas por medio de la fe y la oración plenamente puesta en el Señor. La sagrada biblia es un instrumento para nosotros en conocer y alimentarnos de las riquezas de Dios a través del conocimiento, que nos brinda. Pero al nosotros buscar versículos y esperando que nos aparezca un pelo, eso es más bien superstición y los cristianos católicos, no estamos llamados a confiar tales cosas como esas.
La sagrada biblia en las tentaciones que tuvo Jesús con satanás. Jesús les responde al diablo diciendo: “No tentaras al Señor tu Dios” Mateo 4, 7 En nosotros colocar una confianza en un pelo del cabello y sobre todo anhelando que nos aparezca en la Biblia es tentar al Señor, es colocándolo a él; la prueba para que nos ayude. Sino más bien Dios en los momentos de más dolor y agonía se hace presente como dice en Romanos 8, 28: “Por lo demás, sabemos que en todas las cosas interviene Dios para bien de los que le aman; de aquellos que han sido llamados según su designio.
Queridos hermanos, estamos exhortados en aumentar todo los días en esta situación tan grabe que está pasando la humanidad, en colocar plenamente nuestra confianza en el Señor y él en medio de la tormenta en medio de las grandes dificultades calmara las aguas. ¡Confiemos en Jesucristo que ha resucitado y vive entre nosotros! Feliz Pascua.
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